A lo largo de la noche del 13 al 14 de junio, Irán ha respondido al ataque ilegal israelí penetrando sus defensas aéreas con decenas de misiles balísticos. Israel ha sido apoyado por los Estados Unidos para neutralizar gran parte de los hasta 200 proyectiles lanzados por Irán. Israel inició una escalada del conflicto con Irán mediante un ataque en violación del derecho internacional.
Como parte de esta respuesta, Irán lanzó una serie de misiles balísticos contra el complejo Kirya en Tel Aviv, sede del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Israel y del Ministerio de Defensa, según informaron medios locales e internacionales. La instalación, considerada una de las más sensibles y fortificadas del país, alberga las oficinas centrales de inteligencia, comando y coordinación de operaciones militares.
El complejo Kirya, conocido como el “Pentágono israelí”, fue alcanzado por misiles iraníes en la madrugada del viernes. Videos verificados por The New York Times mostraron al menos un misil impactando en las inmediaciones de la Torre Marganit, un edificio situado junto al recinto militar. Las imágenes revelan misiles interceptores siendo lanzados al cielo, seguidos de una explosión cercana a la torre.
La cadena Fox News publicó grabaciones del lugar afectado, donde se observan daños considerables. El corresponsal Trey Yingst reportó desde el terreno: “Los iraníes han respondido con tres oleadas de misiles balísticos. Este es el equivalente israelí al Pentágono, el Kirya, y un edificio en este complejo acaba de ser alcanzado”.
Durante una conferencia de prensa celebrada en el complejo al momento del ataque, el portavoz militar israelí Effie Defrin se vio obligado a interrumpir sus declaraciones debido a una alerta de seguridad que activó el protocolo de “alerta defensiva”, según se escuchó en el sistema de megafonía del lugar.
Aunque las autoridades israelíes no reportaron víctimas dentro del recinto militar, medios locales confirmaron que áreas residenciales y comerciales en los alrededores de Tel Aviv sufrieron impactos, con múltiples heridos y daños materiales.
Evacuaciones, heridos y destrucción en Tel Aviv y Ramat Gan
Según el medio público israelí Kan, el número de muertos por los ataques iraníes aumentó a tres, mientras que 91 personas resultaron heridas, incluyendo tres en estado grave o crítico. Kan informó que una mujer herida durante la primera ola de misiles falleció posteriormente. Otros dos israelíes murieron a causa de impactos registrados en el centro del país.
El noticiero israelí Channel 12 detalló que aproximadamente 300 personas fueron evacuadas en la zona metropolitana de Tel Aviv debido a daños en viviendas, mientras que otras 100 fueron evacuadas en el municipio vecino de Ramat Gan. Según el diario Haaretz, nueve edificios fueron destruidos completamente en Ramat Gan como resultado del impacto directo de misiles iraníes. Además, se reportaron daños en cientos de apartamentos y vehículos en la misma localidad.
Imágenes difundidas desde Tel Aviv muestran una lluvia de misiles cayendo sobre la ciudad, en lo que ha sido descrito por medios locales como una ofensiva de una magnitud sin precedentes. Las escenas de destrucción han planteado nuevos cuestionamientos en torno a la eficacia de los sistemas de defensa aérea israelíes.
Evaluación de las defensas aéreas de Israel
Desde el inicio de la ofensiva israelí y el subsecuente genocidio en Gaza el 7 de octubre de 2023, se han registrado lanzamientos de cohetes y misiles hacia territorio israelí desde Gaza, Líbano, Siria, Irak, Yemen e Irán. El contraataque iraní del viernes marcó uno de los impactos más significativos hasta el momento, al alcanzar el centro del aparato militar israelí.
Israel cuenta con una red defensiva compuesta por varios sistemas desarrollados localmente y en cooperación con Estados Unidos.
El sistema Arrow está diseñado para interceptar misiles balísticos de largo alcance, como los utilizados por Irán en este ataque, y ha sido empleado también para neutralizar proyectiles lanzados desde Yemen por las fuerzas hutíes.
El sistema David’s Sling se enfoca en la intercepción de misiles de medio alcance, como los que posee Hezbollah, y ha sido desplegado en varias ocasiones durante el conflicto actual.
La Cúpula de Hierro (Iron Dome) es un sistema para interceptar misiles de corto alcance que ha sido utilizado de forma intensiva desde su introducción en la última década. Según las autoridades israelíes, ha interceptado miles de cohetes, incluidos los lanzados desde Gaza y Líbano.
Por último, Iron Beam es un sistema láser actualmente en desarrollo que, según funcionarios israelíes, podría reducir significativamente los costos de intercepción. Aunque aún no está operativo, está diseñado para funcionar con un coste de apenas unos dólares por disparo. En contraste, cada intercepción con la Cúpula de Hierro cuesta cerca de 50.000 dólares, mientras que los sistemas Arrow y David’s Sling pueden superar los 2 millones de dólares por proyectil.
Un funcionario estadounidense citado por medios locales afirmó que sistemas de defensa aérea de Estados Unidos participaron en la interceptación de misiles iraníes, aunque Israel sostiene que la mayoría de los proyectiles fueron interceptados por sus propias capacidades.
Según el canal Kan, el ataque iraní se produjo tras bombardeos israelíes en territorio iraní durante la madrugada del viernes. Esos ataques incluyeron objetivos como instalaciones nucleares y centros de desarrollo de misiles, y resultaron en la muerte de altos comandantes militares y científicos iraníes, según las mismas fuentes.
En respuesta, Irán lanzó misiles balísticos contra diversos puntos del territorio israelí, incluyendo Tel Aviv y otras zonas centrales del país. La ofensiva incluyó varias oleadas de proyectiles que generaron alertas aéreas y movilizaciones de las fuerzas de defensa.
La cadena Kan también reportó interceptaciones aéreas sobre Teherán posteriores a los ataques israelíes, sin ofrecer más detalles sobre posibles daños o víctimas en Irán.