El grupo de resistencia palestina Hamás entregó este viernes una respuesta “positiva” a la propuesta de alto el fuego promovida por Estados Unidos, mostrando disposición para iniciar negociaciones. En un comunicado oficial, el movimiento anunció haber concluido las consultas internas y con otras facciones palestinas, y se declaró “listo para empezar de inmediato y seriamente un ciclo de negociaciones sobre el mecanismo de aplicación de ese marco”.
En reacción, el presidente estadounidense Donald Trump calificó la respuesta como “buena” y destacó el “espíritu constructivo” del grupo. Desde el Air Force One, Trump mostró optimismo sobre un posible acuerdo que podría concretarse la próxima semana, aunque reconoció que la situación “cambia día a día” y que aún no ha recibido informes detallados sobre el avance de las negociaciones.
Según una fuente palestina cercana a las conversaciones, la propuesta contempla una tregua de 60 días durante la cual Hamás liberaría a la mitad de los rehenes israelíes aún con vida, a cambio de la excarcelación de prisioneros palestinos detenidos por Israel. El grupo Yihad Islámica, principal aliado de Hamás, respaldó la vía negociadora, aunque reclamó “garantías suplementarias” para su implementación.
Este anuncio llega en vísperas del viaje del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a Washington, donde el lunes tiene previsto reunirse con Trump para abordar la situación.
Mientras tanto, Israel intensifica los ataques: más de 70 muertos en las últimas horas
Pese a los avances diplomáticos, las hostilidades no se detienen. Desde la madrugada del sábado, al menos 21 personas murieron y decenas resultaron heridas en una serie de ataques israelíes en Gaza, según fuentes médicas locales.
Estos ataques se suman a los al menos 52 muertos reportados el viernes por la agencia de Defensa Civil local, entre ellos 11 civiles que fallecieron cerca de puntos de distribución de ayuda humanitaria.
La ONU denunció que al menos 613 personas han muerto desde finales de mayo en el contexto de repartos de ayuda. De ellas, 509 fallecieron cerca de instalaciones de la Fundación Humanitaria para Gaza, una organización respaldada por Estados Unidos e Israel que comenzó a operar el 26 de mayo, tras más de dos meses de bloqueo total a la entrada de asistencia.
Los repartos gestionados por la Fundación Humanitaria para Gaza han generado escenas de caos, con multitudes desesperadas y, en numerosas ocasiones, fuego abierto por parte del ejército israelí. La ONU y las principales agencias de ayuda se niegan a colaborar con esta fundación, a la que acusan de servir objetivos militares israelíes y de violar los principios humanitarios fundamentales. La organización niega haber registrado incidentes cerca de sus instalaciones.
En el hospital Naser de Jan Yunis, varias mujeres lloraban este viernes el cuerpo de un joven de 19 años que murió mientras intentaba recoger alimentos. “Mi hijo fue a buscar harina. Nos dicen ‘vengan a buscar ayuda’, vamos y nos disparan desde encima”, relató su madre, Nidaa Al-Farra.
Desde el inicio de la ofensiva israelí en octubre de 2023, al menos 57.268 palestinos han muerto según el Ministerio de Salud en Gaza