Riyad Mansour, embajador palestino ante la ONU, no pudo contener las lágrimas durante su intervención en el Consejo de Seguridad.
Rompió en llanto al relatar el caso de la doctora Alaa al-Najjar, una pediatra palestina que perdió a nueve de sus diez hijos.
Los pequeños llegaron al hospital donde ella trabajaba…pero ya era demasiado tarde.