Estambul, Türkiye — A más de 10.000 kilómetros de Bogotá, en la histórica ciudad turca de Estambul, más de 200 colombianos residentes en Türkiye se reunieron para conmemorar el 20 de julio a bordo de un barco que cruzó las aguas azules del estrecho del Bósforo. Fue la celebración del Día de la Independencia, una fecha que sigue viva en el corazón de quienes, aunque han cruzado fronteras, mantienen un fuerte vínculo con “la tierrita”, como llaman cariñosamente a su patria.
Para Edwing Fabián Jiménez Roa, originario de los llanos, una región de Colombia que describe como profundamente patriótica, la celebración tuvo un significado especial.
“Anteriormente estábamos bajo el virreinato español y el tener nuestra autonomía nos ha ayudado a poder desarrollarnos como comunidad, como país y obviamente generar una mayor unión entre cada uno de los compatriotas”, dijo en diálogo con TRT Español el ingeniero civil de 30 años, al destacar la situación de mayor igualdad que, según Jiménez Roa, vive hoy su país. “Antes teníamos diferencias de castas. Los que eran padres españoles tenían un mayor grado que los que éramos mestizos como nosotros”.
Todos a bordo
Bajo el lema de "La Colombianidad en Estambul", globos con los colores de su bandera decoraron la entrada del barco, que llevó a más de doscientos colombianos y a TRT Español. Allí, el embajador de Colombia en Türkiye, Julio Aníbal Riaño, y el cónsul Rafael Antonio Quintero Cubides —quien asumió el cargo en enero de 2025 en el nuevo Consulado de Colombia en Estambul— dieron un cálido saludo a todos los presentes bajo un fuerte sol de verano.
A bordo, todos escucharon y se pusieron de pie para los himnos nacionales de Colombia y Türkiye. Luego, Quintero subió al podio, donde estaban las banderas de ambos países. Desde allí, expresó su orgullo por compartir ese momento con la diáspora y resaltó que, a pesar de los desafíos que ha enfrentado Colombia —incluido el conflicto armado y el desplazamiento forzado—, su país “no ha fallado a la libertad y la democracia”.
Para el embajador Riaño, el viaje no fue solo un paseo, sino un símbolo: un recordatorio de que, sin importar dónde se encuentren, los colombianos llevan viva a la patria en su interior. "Y qué mejor manera de celebrarlo que entre amigos, rodeados de historia y en un país como Türkiye, que nos ha acogido bajo el cielo que vio nacer reinos y civilizaciones alzarse. Un puente de culturas que nos ha acogido con su proverbial hospitalidad y nos permite comprender que la patria también es donde uno es recibido con el alma”, declaró.
Luego, el embajador resaltó la estrecha relación entre Türkiye y Colombia, una relación que comenzó en 1959 y se fortaleció con la apertura de embajadas en 2010 y 2011, respectivamente, y que hoy los posiciona como socios estratégicos. Destacó que ambos países continúan construyendo puentes para profundizar su cooperación a través de visitas, acuerdos vigentes y voluntad política.
Asimismo, el máximo representante de Colombia en el país destacó “la insomne labor por la paz y la concordia en el mundo, predicada por doquier por el presidente Recep Tayyip Erdogan, lo cual es encomiable. Dicha labor es reconocida por la comunidad internacional. En nuestro caso, expresamos agradecimiento por el apoyo de Türkiye al anhelo de paz total en nuestro país, una causa que ha impulsado con ahínco nuestro jefe de Estado, Gustavo Petro”.
Historia, memoria y pertenencia
La independencia de Colombia comenzó el 20 de julio de 1810 con el levantamiento del Florero de Llorente en Santa Fe de Bogotá, que dio paso a una junta autónoma contra el dominio español. Tras años de conflictos y una violenta reconquista, el 7 de agosto de 1819 el Ejército Libertador, liderado por Simón Bolívar, venció en la Batalla de Boyacá, lo que permitió la creación de la Gran Colombia, que unió los territorios de Colombia, Ecuador, Panamá y Venezuela. Puso fin al control colonial en gran parte de la región.
Desde entonces, el 20 de julio no es solo una fecha en el calendario: es símbolo de lucha, memoria y pertenencia. Por lo tanto, la diáspora colombiana no dejó pasar la ocasión para celebrar entre banderas flameantes, música y risas.
“Es una gran oportunidad para reencontrarnos y sentirnos más cerca de nuestro país, incluso a miles de kilómetros de distancia”, dijo Mayra Alexandra Idarraga Medina, una colombiana de 29 años que trabaja en exportaciones en Ankara y está casada con un ciudadano turco. “Es como tener un pedacito de nuestra tierra”.
Rumba para celebrar la independencia
Mientras el barco navegaba por el Bósforo, la distancia no borró ese sentido de pertenencia. La comunidad celebró con varios bailes. Un DJ animó la fiesta con temas de cantantes como J Balvin, Juanes y Carlos Vives, entre otros artistas colombianos.
Mientras todos bailaban la conga, el barco pasaba frente a sitios emblemáticos de Estambul como el Palacio de Dolmabahce.
Becas y oportunidades
Para Alejandra Rodríguez, originaria de Santa Isabel, Tolima, vivir en Türkiye los últimos seis años promoviendo el turismo ha sido una experiencia transformadora. “Ha abierto las puertas a los colombianos con mucho amor. Nos cobija, nos da oportunidades a quienes queremos salir del país y demostrar quiénes somos los colombianos”, dijo Rodríguez en diálogo con TRT Español.
Dana Betancourt, de 26 años, estudia una maestría en ingeniería biomédica en Türkiye gracias a una beca. Afirma que las clases han sido clave en su proceso de adaptación, tanto académica como cultural y socialmente. “Es muy importante, porque solo así puedes adentrarte más en la cultura y entender realmente cómo relacionarte con las personas en Türkiye”, dijo a TRT Español. “También te permite comprender la forma en que piensan, a través de su lenguaje”.
Su amiga, Liz Velasco, bióloga de 25 años, destacó la importancia de estos espacios para la comunidad colombiana. “Es un ambiente para reunirse, pero también para compartir lo que aqueja a diferentes grupos”, señaló. “Todos estamos muy dispersos en Türkiye, así que es una forma de demostrar que, pese a la distancia y a estar en otro país, podemos ayudarnos y apoyarnos mutuamente”, añadió.
El encuentro también fue un momento de reflexión para la periodista colombiana Valeria Cuevas González, quien llegó a Türkiye gracias a una beca turca y al deseo de estudiar en un país que la había cautivado años antes. “Cursar una maestría en este lugar histórico, antiguo y vibrante, además de hacerlo en turco, le dio un giro decisivo a mi vida”, dijo a TRT Español.
Superar la barrera del idioma y adaptarse a una nueva cultura no fue fácil, pero la experiencia la transformó. “Fue tener que lidiar con cambios radicales, inesperados y difíciles”, señaló. Cuatro años después, se considera una embajadora de su país: “Llevo conmigo el mensaje, la alegría y el amor por mi país y por los míos en el otro rumbo que elegí”.
Andrés Casas, originario de Bogotá y estudiante de ingeniería de sistemas con beca turca, también se esforzó.
“Como migrante, claramente uno enfrenta muchas dificultades al dejar la zona de confort, el país, toda tu cultura y enfrentarte a algo nuevo”, explicó Casas en entrevista con TRT Español. “Hay que adaptarse. Estos espacios permiten ese reencuentro, recordar esos momentos, lo que somos”.
En medio de esas dificultades, encontró consuelo en el fútbol: hoy sigue de cerca a los futbolistas colombianos en la Super Lig, como Davinson Sánchez, del Galatasaray, y Jhon Durán, del Fenerbahce.
Nuevos comienzos y crecimiento
"Llegué buscando oportunidades", contó Isabel Quiñones, que se desempeña asesora de estética en un call center, en conversación con TRT Español. "Una conocida me habló de Türkiye y así fue como llegué”.
Y lo que Isabel encontró durante las celebraciones de este domingo fue unidad con sus compatriotas. "Me siento en casa. Me siento integrada”, señaló.
Por su parte, María, quien no dio su apellido, nació en Bogotá y creció en Cali. Tras llegar a Türkiye como turista, decidió quedarse al encontrar un entorno seguro y con oportunidades. “He tenido la fortuna de estar muy bien aquí. Crecí profesionalmente, me quedé y comencé una carrera”, contó en entrevista con TRT Español.
Transcender fronteras
Para algunos colombianos en Türkiye, la experiencia migratoria es también una historia de amor y conexión. Andrea Almanza, profesional en Negocios Internacionales, llegó hace un año y medio. Se casó con Selman, un ciudadano turco, en una unión que trasciende fronteras y culturas.
“Este día de la independencia es un día muy importante porque nos conecta con los colombianos”, concluyó en diálogo con TRT Español. “Nos hace volver a nuestras raíces a pesar de no estar en nuestra tierra, vuelve otra vez a nuestro país, a nuestra patria. Nos recuerda quiénes somos. Y no nos sentimos tan lejos”.
Y así, la noche culminó con la iluminación, por primera vez, del icónico puente Sultán Mehmet de Estambul con los colores de la bandera colombiana. Un símbolo de cómo la unión de ambos pueblos sigue profundizándose, incluso a pesar de la distancia.