El Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha prorrogado el mandato de Francesca Albanese como Relatora Especial sobre los territorios palestinos ocupados por tres años adicionales, a pesar de la oposición de varios grupos proisraelíes, incluido Estados Unidos.
El viernes, durante el último día de la 58ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, se celebró una votación para aprobar un segundo mandato de tres años para Albanese, extendiendo su cargo hasta 2028.
Albanese había enfrentado una creciente presión por parte de grupos y políticos proisraelíes que exigían el fin de su mandato. Ella, ha señalado de manera constante las acciones de Israel como una limpieza étnica y un genocidio contra los palestinso tanto en sus informes oficiales como en sus apariciones en los medios.
En la votación, varios países habían mostrado reticencia a apoyar su reelección debido a su crítica abierta hacia Israel.
En la diana de organizaciones pro-Israel
La ofensiva contra Francesca Albanese ha sido impulsada por figuras como el diputado laborista británico David Taylor, quien la acusó de justificar el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 y de retratar a Israel como una “invasión colonial de colonos”, según declaró en una entrevista con The Jewish Chronicle, un medio proisraelí.
Organizaciones proisraelíes, como UN Watch, han estado a la cabeza de la campaña para impedir su continuidad. Esta ONG publicó un informe de 60 páginas en el que acusa a Albanese de promover el antisemitismo y el “terrorismo” desde su rol en la ONU. Además, impulsó una petición dirigida al Consejo de Derechos Humanos para que rechazara su reelección.
Durante una reciente sesión del Consejo en Ginebra, el director de UN Watch, Hillel Neuer, pidió la terminación inmediata de su mandato.
Otros grupos, como el Congreso Judío Mundial y la organización juvenil sionista Betar, también han arremetido contra Albanese. Según informes, miembros de Betar llegaron incluso a amenazar con agredirla durante una visita reciente a Londres, haciendo alusión a los ataques aéreos israelíes en Líbano el año pasado.